Fur Buddies ayudan a los niños a dormir

Así como el calor brinda consuelo y relajación, la terapia de frío también cumple un rol fundamental en el cuidado cotidiano de los más pequeños.

Nuestros peluches térmicos Fur Buddies no solo se calientan: también pueden enfriarse en el freezer para ofrecer un alivio refrescante, seguro y reconfortante.

Al colocarlos en frío, los Fur Buddies ayudan a reducir inflamaciones, bajar la fiebre, aliviar golpes o picaduras y brindar confort en los días de altas temperaturas. Su tamaño compacto y su textura suave permite que el contacto con la piel del niño sea agradable y no invasivo, lo que facilita su aceptación incluso en momentos de incomodidad o malestar.
Además, al tratarse de un peluche querido y familiar, el niño experimenta una sensación de acompañamiento emocional mientras recibe los beneficios físicos del frío. Esto transforma una aplicación terapéutica en una experiencia cálida y contenida, aun cuando se utiliza el frío como recurso.

Diseñados para formar parte de la rutina de cuidado, los Fur Buddies solo necesitan colocarse en el freezer dentro de una bolsita para mantenerse higiénicos y estar siempre listos para usar.

Una solución práctica, segura y llena de ternura.

Somos fabricantes: desarrollamos nuestros propios diseños y ofrecemos venta mayorista con stock disponible.